Según el estudio, el mayor logro durante el segundo año del gobierno fue la actualización tributaria, a pesar de un aumento en la percepción de corrupción. La incapacidad del gobierno para hacer avanzar su agenda en el Congreso y la falta de coordinación entre la presidencia y la vicepresidencia también fueron señalados por el estudio que califica la gestión como bicéfala.
“Lo que es evidente es que no existe coordinación entre los tres pactos”, señaló Carmen Ortiz, coordinadora del POP, en la presentación del informe realizada ayer. El papel protagónico de la vicepresidenta Roxana Baldetti en las decisiones del Ejecutivo fue calificado como positivo por no limitarse a una función decorativa sino asumir liderazgo; pero como negativo por las contradicciones que ha tenido con el presidente.
“Avanzar en una sola direccionalidad sería el reto para el Ejecutivo en este año” expresó Renzo Rosal, director de Incidencia Pública de la Universidad Rafael Landívar (URL). “La figura vicepresidencial se involucra en la coordinación del gabinete lo cual está muy bien pero cuando se pasa de los límites y competencias existe confusión y contradicción entre ambas partes que pone en riesgo la gestión del gobierno”, expresó el académico.
A su vez, la evaluación del segundo año de mandato permite develar que el modelo de gestión por resultados que promovió el presidente en su discurso de investidura no se ve materializado en la práctica.
El informe también menciona que el cambio de la administración de los programas sociales afectó el desempeño del Pacto Hambre Cero, y con un presupuesto amplio, la baja ejecución presupuestaria que presentó este programa fue señalamiento constante. En junio, el titular de la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Sesan), Luis Enrique Monterroso, aseguró que la ejecución se encontraba en un 40%; y al terminar el año, el Sistema de Contabilidad Integrada (Sicoin) reportaba que alcanzó un 77.57% en 2013, incluso con un programa cuya ejecución fue nula.
En cuanto a la realización del estudio, Carmen Ortiz explicó que en el caso del Pacto de Seguridad existe dificultad para evaluarlo debido a la escasez de indicadores presentados en el plan del gobierno. “Las estadísticas criminales no son adecuadas para medir la efectividad de las medidas adoptadas por el gobierno”, refirió Ortiz. Ante la falta de información confiable para monitorear y evaluar los pactos, el Programa de Opinión Pública de la URL realizó una evaluación cualitativa que abarca la revisión de los avances y retrocesos en cada una de las materias que abarcan los pactos.