Ahora sí, con solamente dos candidatos compitiendo, la ciudadanía debería exigir debates de calidad sobre los temas de fondo que requieren ser discutidos para el desarrollo del país. El “qué hacer” esta esbozado en los planes de Gobierno de ambos partidos; el “cómo hacerlo” resulta todavía una gran incógnita y el “cómo pagarlo” un tema tabú.
Si el “cambio” está de moda, se reduce solo a los títulos de los dos documentos: el Plan Nacional para el Cambio del Partido Lider y la ...
Ahora sí, con solamente dos candidatos compitiendo, la ciudadanía debería exigir debates de calidad sobre los temas de fondo que requieren ser discutidos para el desarrollo del país. El “qué hacer” esta esbozado en los planes de Gobierno de ambos partidos; el “cómo hacerlo” resulta todavía una gran incógnita y el “cómo pagarlo” un tema tabú.
Si el “cambio” está de moda, se reduce solo a los títulos de los dos documentos: el Plan Nacional para el Cambio del Partido Lider y la Agenda del Cambio del Partido Patriota. Ambos promueven ejes programáticos muy clásicos, en la continuidad de los planes de gobierno propuestos en las contiendas anteriores. Aún así podrían extraerse de allí los grandes problemas que atraviesa el país y que requieren de un debate ciudadano que un proceso electoral serio podría estar en condición de promover.
Por ejemplo: ¿cuál es la postura real de los candidatos en torno a la gestión de los recursos naturales del país? Ese tema es probablemente uno de los más importantes, complejos y estratégicos para la transformación de Guatemala. Puede constituir un medio de desarrollo del país o el campo de una serie de conflictos territoriales agudos que pongan en riesgo la gobernabilidad.
Más allá de la astucia política que lo llevó a promover FONPETROL, ¿cuál es la posición de Manuel Baldizón sobre las grandes reservas de petróleo que tiene el país? Una vez asegurados los beneficios fiscales y sociales de la explotación mediante el rediseño de las regalías y resueltos los problemas de impactos ambientales con el fortalecimiento de las instituciones públicas reguladoras, aún quedaría por definirse si esta actividad forma parte del modelo de desarrollo que el país requiere, luego de dar respuesta a las siguientes interrogantes: ¿Cómo combinar la actividad petrolera con la protección de la biodiversidad y el turismo ecológico? ¿Cuáles son los aportes en términos de empleo o de especialización profesional que aporta el petróleo?
En varias ocasiones, Otto Pérez manifestó su inclinación en seguir apoyando la minería, “tomando en cuenta la opinión de las comunidades, siendo amigable con el ambiente para evitar la contaminación a los recursos hídricos y no afectar la salud de los guatemaltecos y guatemaltecas”. ¿Cuáles son los mecanismos reales que propone el candidato para alcanzar ese objetivo? La gestión de los recursos naturales requiere de un Estado fuerte con una visión contundente encima de los intereses particulares para que los beneficios de la explotación sean factores de desarrollo y democratización y no el pago retroactivo de favores de campaña.
Resolver esas dudas pasa por el establecimiento de una verdadera política consensuada de ordenamiento territorial que responda a un nuevo modelo de desarrollo del país y que defina claramente los usos del suelo y la localización de las principales actividades económicas. Menuda tarea para el próximo presidente.
En un artículo publicado hace más de siete años en elPeriódico, Edgar Gutiérrez hacía referencia a la profecía de los economistas sobre la “maldición de los recursos naturales”, según la cual los países con abundantes recursos obtienen peores resultados que aquellos con menos. ¿Qué proponen nuestros candidatos para que Guatemala sea una excepción a ese sombrío vaticinio?
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