Medallas olímpicas y autoestima nacional
Psicológicamente, se traduce en una autoestima nacional pobre, que se ve frustrada y desinflada en la mayoría de realidades cotidianas, índices o competencias. Pero que mejora momentáneamente en situaciones como el logro de estas medallas olímpicas.
8 12 13
Tipo de Nota:
Opinión
Medallas olímpicas y autoestima nacional
01 de Agosto de 2024
Las raíces emocionales del nacionalismo son muy profundas. La educación (parte de lo que Althusser conceptualizó como aparato ideológico del Estado) imprime desde pequeños el aprecio por los símbolos patrios y por todo aquello que represente al país. Miles de repeticiones del himno nacional y la presencia constante de otros ritos, símbolos y señales que se identifican con Guatemala, crea una conexión muy duradera, que mantiene hondos reflejos.
De adulto, se puede ser muy crítico con la realidad del país o desdeñar ciertas convenciones relativas al nacionalismo, pero las medallas olímpicas recientemente obtenidas generan intensas emociones y elevan la usualmente maltrecha autoestima nacional.
Las opiniones expresadas en este artículo son responsabilidad exclusiva del autor. Plaza Pública ofrece este espacio como una contribución al debate inteligente y sosegado de los asuntos que nos afectan como sociedad. La publicación de un artículo no supone que el medio valide una argumentación o una opinión como cierta, ni que ratifique sus premisas de partida, las teorías en las que se apoya, o la verdad de las conclusiones. De acuerdo con la intención de favorecer el debate y el entendimiento de nuestra sociedad, ningún artículo que satisfaga esas especificaciones será descartado por su contenido ideológico. Plaza Pública no acepta columnas que hagan apología de la violencia o discriminen por motivos de raza, sexo o religión
Más de este autor