Volver a pensar el futuro / Con cuántas esperanzas carga el futuro. La del tiempo renovado, la del presente dejado atrás, la de los niños de hoy reformando el mundo… Pero el tiempo se repite, el presente es permanente y los niños que sobrevivieron a las bombas, ahora están muriendo por el hambre en Gaza. Y, en Colombia, portan armas, y van jugando a ser pequeños sicarios. Y las niñas siguen pariendo niños en este país. La lista es larga y no muy prometedora. Quién sabe si aún podremos cambiar de rumbo o empezar a buscar quien pueda hacerse cargo de los años por venir.
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Quince años sin Saramago / Apareció por las redes una foto en penumbra del patio de la Cooperación española en Antigua Guatemala, lleno de sillas de plástico, lleno de gente, frente a un escenario en el que conversan tres. Es el año 2001, es la visita del Premio Nobel de Literatura de 1998, el escritor portugués José Saramago. En el costado izquierdo de la fotografía, entre la masa de personas apostadas en el pasillo, seguramente estoy junto a mi padre, con varios kilómetros de trayecto encima y una mochila llena de libros detrás. Libros que habían llegado a la única librería que existía en Xela, y que me habían ayudado a transitar el primer gran naufragio vital y emocional al que sobreviví cuando tenía 21 años de edad. No recuerdo lo que dijeron allí esa noche. Lo que sí recuerdo fue un intenso silencio momentáneo, un instante sordo que pareció sobrevolar el lugar, luego de que se manifestara el Saramago que no creía en Dios, el que decía que, si existiera, tampoco lo necesitaba. Y haber volteado a ver a mi padre, un cristiano comprometido, parado a mi lado, en silencio también, viendo hacia el frente.
Nunca volvimos a hablar de la experiencia, que yo siempre recordé con gracia, tomando en cuenta lo opuestos que siempre fuimos. Y que, ahora, ya sin Saramago y sin él, me dio por evocar. De ese viaje nos quedó una fotografía, otra, en la que yo estoy parada detrás del Nobel, y mi padre es el guiño de luz de un flash, del otro lado, en medio de la noche.
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